viernes, 29 de noviembre de 2013

CANAL 9 ES NUESTRO

Hoy, tras 25 años, echa el cierre Canal 9, la TV autonómica pública valenciana. Y a mucha gente le pesa porque lo siente como suyo. Le hablaba de cosas de su tierra, de su gente, en sus dos lenguas oficiales... algo muy ligado a la cultura y a la comunicación de esta Comunidad. Los índices de audiencia no acompañaban. Mucha de la gente que ahora lamenta que se haya cerrado tan sólo la veía en contadas ocasiones.

Yo recuerdo la época del advenimiento de las televisiones autonómicas como algo muy novedoso. Para mi, como para todos los que vivíamos en la Comunidad de Madrid, el nacimiento de Telemadrid fue algo impactante, algo nuevo. Entonces se nos decía que estas televisiones iban a ser útiles, cercanas al ciudadano, que nos ofrecerían lo que los canales "nacionales" no podrían hacer. Recuerdo especialmente y con cariño la cobertura que se hizo un año por Telemadrid del Paris-Dakar. Día a día, un magnífico (de verdad que lo era) periodista cubría de forma excelente aquel rally con un especial verdaderamente mágico cada noche. Creo que Tierry Sabine aun vivía y ese Rally era algo auténtico todavía. ¿Cuando costaría aquello? Imagino que una auténtica millonada. Entonces pensábamos que la publicidad lo pagaba todo. Craso error: lo pagábamos nosotros con nuestros impuestos. Los publicistas no son tontos y los anunciantes tampoco. Un anuncio que lo puede ver un 15/20 % de 3 MM. de habitantes, ¿cuanto puede costar? ¿Tanto como para costear unos informativos a la altura de TVE, con corresponsales en Irak, por ejemplo, incluidos?

Para lo que más han servido las televisiones autonómicas es para hacer propaganda de los políticos de turno. Las televisiones, al igual que otras instituciones o empresas públicas o privadas que han controlado muchos políticos han servido como caja de resonancia para sus "hazañas". Buenos, algunas instituciones han servido únicamente como "caja".

Eso sí, HOY, siete años más tarde, se han acordado de que existe la Asociación de Víctimas del Metro. Es probable que los intrépidos reporteros que han entrevistado a su presidenta HOY en Canal 9 opten al Ortega y Gasset de este año, por su ejemplo de periodismo social, íntimamente ligado a la comunidad en la que viven, implicado en sus problemas y con una infinita capacidad de denuncia ante el poder establecido. Impresionante documento para mayor gloria de la profesión.

En su pleno apogeo, Canal 9 ha tenido 1.700 empleados. Más que Antena 3, Cuatro, Tele 5 y La Sexta JUNTOS. Si a eso unimos hallazgos celebradísimos en su día como, por ejemplo, Tómbola, de lo que nos extrañamos es de que no la hayan cerrado antes. La retransmisión de asuntos autóctonos por un equipo de periodistas profesionales e independientes es, seguramente, mucho más barata de lo que nos están costando estos juguetes de la comunicación. 

La deuda que la Generalitat tiene afrontar durante los próximos 17 años, tras el cierre de C9 es monstruosa. Se deben 1.000 millones de euros, más de 200 € por cada habitante de la Comunidad Valenciana. O sea, en mi casa tocamos a 800 €/año.

Con semejante hipoteca que vamos a tener que pagar entre todos, no os extrañe que haya tanta gente que sintamos la pérdida de Canal 9 como propia. Es que, realmente, era nuestro y no lo sabíamos.




domingo, 17 de noviembre de 2013

¡MARIANO RAJOY, PRESIDENTE!

Muzzati: «Muchos 'rebotados' se acercan a UPyD al no tener porvenir en su partido»
Nuestro Coordinador Territorial ha dicho a la prensa lo siguiente: "Hay gente que ha venido porque ve que su porvenir político en otro partido no era bueno y buscaban una salida. Estamos teniendo mucho cuidado en este sentido, los pasamos a todos por la misma prueba, que es ser afiliados de base y ninguna promesa de réditos electorales o políticos."



Y esto está muy bien, pero que muy bien dicho. Y es del todo cierto. Y si se toma nota y se lleva a la práctica, mejor aún. Está más que claro que aquí somos cada uno de nuestro padre y de nuestra madre. Y que vírgenes políticas ya no quedan casi. Si no hemos ido en otras listas o militado en  otros partidos, al menos sí que hemos votado a otros antes. Y eso ni es un delito ni nos incapacita para ser UPyD, por supuesto. Pero lo que hace falta es separar el grano de la paja (con perdón). Y predicar no es lo mismo que dar trigo. Yo no creo en el "upeydismo" sobrevenido, y menos ahora, con el viento a favor. Me resulta difícil creer en ciertos "upeydistas convencidos" que hace menos de 2 años proclamaban enfervorizados (con admiraciones incluidas, tal cual es el título de este artículo) al viento digital en sus blogs la victoria de Rajoy y la confianza en su gestión, en cuyas listas participaron poco menos que empujados por el fervor popular hacia su excelsa persona. 

Vamos, que no creo en caídas del caballo estilo San Pablo. No tengo la suficiente fe. Debe ser por eso que soy agnóstico. Y, lo siento por ellos, pero a esos casos no les doy la presunción de inocencia ni se la daré hasta bien pasadas las próximas elecciones y dependiendo de su trabajo. En 2011, UPyD tenía ya 4 años de vida y, sin embargo, alguno eligió todavía al PPSOE (caballo ganador entonces) para promocionarse políticamente. Y ahora no es que se caigan del caballo convencidos de una nueva fe, sino que lo cambian cuando el suyo da síntomas de ahogarse en su propio vómito. Pues va a ser que no me lo creo ni harto vino, como dice mi padre.

lunes, 4 de noviembre de 2013

RESACA DEL II CONGRESO

Aunque sólo como invitado, he tenido el enorme privilegio de asistir al II Congreso de UPyD. En el, se ha constatado que el partido está más fuerte dentro y fuera. Hemos hecho gala de democracia interna, mayor que en ningún otro partido, y de nuestra capacidad para adquirir y cumplir nuestros compromisos.

A mi me ha servido para ver más el partido "por dentro". A lo que llega un simple invitado, vaya. Quizá un poquito más, la verdad...

Y esta visión me ha llevado a tres conclusiones:

Una, la que ve cualquiera y la que repitió Rosa Díez: que somos alternativa y que nuestro compromiso con la sociedad es lo primero. Somos diferentes y tenemos vocación de seguir siéndolo. Y es eso estamos todos y quien no lo esté, quienes quieran reproducir aquí amaneramientos propios de los partidos viejos, que vayan buscando la salida antes de que se la busquemos los demás, que será lo antes posible. 

Dos, que la unidad ahora es uno de nuestros activos más importantes y que las discrepancias, legítimas siempre, ha de ser encauzadas por los medios que tocan y ya tiene el partido. Y en eso, espero que los receptores de las mismas tengan siempre las antenas abiertas y el talante suficiente como para admitirlas de buen grado, cosa que no dudo, respetarlas, someterlas a debate y, si procede, considerarlas lo suficiente como para actuar en consecuencia. Dejemos otros foros para notas al margen, comentarios, valoraciones generales o también concretas pero siempre con el debido respeto, primero de todo, a quienes nos votan o podrían votarnos.

Y tres... que hay cosas que tenemos que son buenas pero que son susceptibles de mejora. En algunos casos, de mucha mejora. Y no es cuestión de falta de medios, sino de anticiparse a las realidades y aceptarlas. En relación con el punto anterior, estoy seguro de que quien corresponda agradecerá muy mucho que le hagamos llegar nuestras sugerencias porque todas ellas serán positivas para el partido y nos ayudarán en el camino trazado que no es otro que el de servir al ciudadano sacando esta sociedad del estado en el que está.

Quien sea que le toque, que se vaya preparando a abrir una carpeta con mi nombre, si no la tiene ya.